marocco col rostroEl Negro Alejandro Dolina suele decir que siempre es mejor enfrentar los partidos importantes con amigos, porque, en caso de perder, la derrota se hace más llevadera y la angustia se mitiga, mientras que -en el caso de la victoria- la alegría al ser compartida con nuestros compañeros es infinitamente más grande.

Por Antonio Marocco

columna maroccoEstamos viviendo una primavera un tanto atípica por varias cuestiones: algunas naturales y otras provocadas por el hombre. Que llueva en Salta a esta altura del año no es algo habitual. Sin embargo, fue una bendición para algunas zonas productivas de la provincia.

Por Antonio Marocco (*)

columna maroccoEn Salta se escucha decir a menudo que, después de la Procesión del Milagro, casi que el año se va terminando; que apenas quedan las fiestas, y que prácticamente debemos poner los ojos en el nuevo calendario.

Por Antonio Marocco (*)

columna maroccoSuele ser un error frecuente en ciertos espacios del campo nacional y popular soslayar el problema de la corrupción y su impacto en la opinión pública.

Por Antonio Marocco (*)

Es lo que estamos viendo en estos días: una agenda informativa, política y gubernamental dominada casi de manera exclusiva por el debate en torno a las causas judiciales que avanzan sobre dirigentes tanto del oficialismo como de la oposición.

columna maroccoEstamos pisando los últimos días de agosto con la convicción de que lo pasaremos. A pesar de los incendios en los humedales del Paraná, a pesar de la inflación récord y a pesar de la teatralización de la Justicia y la política argentina.

Por Antonio Marocco

08 21 maroccoSe cumplió un nuevo aniversario del fallecimiento de uno de esos hombres que suelen cambiar la historia, que inauguran épocas. Hombres que trascienden su causa y se vuelven causa para las generaciones posteriores.

Por Antonio Marocco

08 14 marocco

Esta semana fue importante para Salta por muchas definiciones que, aunque parezcan reservadas para el ámbito de la política, en realidad generarán un impacto directo en la economía doméstica y en el día a día de la sociedad en general.

Por Antonio Marocco (*)