Por Natalia Aguiar

Parece que el presidente Javier Milei subestima a los argentinos, no sólo a la mayoría que lo votó, sino a todos y todas.

Pretende que se crea que el aumento del 170% de los salarios de los senadores, más un aguinaldo nuevo, fue algo intempestivo, sin arreglo previo. Además, ataca y ataca a la prensa sin cesar en contra de todos los principios libertarios que pregonó antes de llegar al poder.

Un libertario genuino, de verdad, nunca atacaría a la prensa y se haría el desconcertado con un acuerdo previo que debió haber, sin lugar a dudas, para que los senadores se tomaran tamaño atrevimiento. Sin embargo, el presidente y la vice, Victoria Villarruel, se muestran sorprendidos, pero esto fue consensuado.

Se arregló esto en los túneles del Senado, como también se llegará a un acuerdo con los gobernadores a los que Karina Milei y Martín Menem están visitando uno por uno. ¿Qué es lo que está en juego? La aprobación de la ley Base, más el nombramiento del polémico juez federal Ariel Lijo como ministro de la Corte, y otros proyectos de ley que necesita el Gobierno para avanzar.

El costo de no quedar knock out les saldrá muy caro a los argentinos.

Los senadores no solo se duplicaron las dietas: también se asignaron un aguinaldo que hasta ahora no cobraban. El tema son las formas y el momento que vive la Argentina. O sea, los políticos desde el presidente hacia abajo le piden al pueblo lo que ellos no hacen. Esfuerzos, sacrificios, austeridad.

La resolución aprobada el jueves pasado incluye 13 dietas anuales, no 12; la decimotercera es para pagar dos medio aguinaldos; cómo se negoció el proyecto y su vínculo con los pliegos de los embajadores.

Ahora indignados todos, los diputados quieren su parte de la torta, y presionan a Martín Menem para actualizar las dietas, pero no lo plantearán en el recinto.

Según ellos, los salarios en la Cámara Baja están congelados desde diciembre y oscilan entre $1,4 y $1,9 millones; el malestar crece e incomoda al presidente del cuerpo, que sugirió que la solución vendría después de la aprobación de la “ley de Bases” o “Ley Base”.

“Acting”

La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió acusó a Victoria Villarruel de lo que sucedió en el Senado, al considerar que lo que ocurrió en el recinto fue un “delito”, del que sería responsable. Además, dijo que Milei hace “acting” y lo involucró a Guillermo Francos, ministro del Interior. Describió al aumento salarial como “escandaloso” y que se hizo a escondidas.

“Toda la vida defendí que debían ganar bien. Lo que no pueden ganar es escandalosamente bien”, sostuvo Carrió en declaraciones mediáticas y sentenció: “Es un delito. Es un delito donde están implicados todos, incluso la vicepresidenta. Es un delito, por lo menos moral, seguro”, aseveró.

Además arremetió contra el embajador en Israel, el rabino Axel Wahnish, a quien tildó como un “impresentable”. “Se lo puedo asegurar, por los antecedentes que yo tengo. Y además sin experiencia de ningún tipo en materia diplomática, para un lugar que está enfrentando una escalada que puede terminar no ahora, sino después con Taiwán, en una tercera guerra mundial. Entonces, una irresponsabilidad. Ahora esto se acordó, por eso se votó finalmente el acuerdo del embajador ante Israel, que quiere llevar la embajada a Jerusalén, que es un territorio de conflicto internacional reconocido por la ONU”, expresó.

“Acá hay una negociación muy clara. Acá hay un showman que es el Presidente. Esto se negoció entre el ministro del Interior, Francos, que está tratando de sacar los embajadores”, enfatizó Carrió.

Toma y daca

La realidad es que Milei y sus funcionarios están negociando con la “casta” y el costo lo pagan los ciudadanos que pagan impuestos.

Tal es la situación que hasta se debe aguantar que el ministro de Economía, Luis Caputo culpe a los argentinos por la inflación. Así como lo lee, sin pelos en la lengua, muy suelto de cuerpo, el funcionario responsabilizó a los argentinos por la suba de los precios, y fue cruzado en redes por economistas y ex laderos del propio Javier Milei, que le cuestionaron su capacidad técnica y su diagnóstico de la realidad.

La semana pasada en un encuentro con banqueros del JP Morgan en los Estados Unidos, que se dio en un intervalo de los encuentros con el FMI, el funcionario aseguró que "la inflación continuará. Y la única razón es porque los argentinos están con esta tendencia a pensar que todo va a salir mal. Entonces ¿qué pasó?

Casi todo el mundo fijaba el precio de sus productos en la tienda de primera línea con un dólar a 2.000 pesos, porque eso es lo que le decían todos los economistas de Argentina. Los precios se fijaron a un tipo de cambio muy alto que no ocurrió.

Tras las declaraciones del ministro, otros economistas le saltaron a la yugular con catarata de críticas en redes, porque para ellos, Caputo va en contra de la teoría de la inflación que maneja el propio presidente, Javier Milei, que circunscribe el fenómeno al signo único de la emisión monetaria.

Parece que Caputo estaba “nervioshhhhhhho”, es que sus tratativas ante el Fondo Monetario Internacional no dieron frutos y el organismo rechazó facilitar fondos.

El economista Diego Giacomini, ex socio de Milei y coautor de libros con el presidente, fue muy claro: "Por un segundo asumamos que es cierto lo que decis, Caputo... parecería que la gente piensa que va a salir todo mal porque es mala, no porque vos no tenés reputación, ni credibilidad, porque lo que haces es inconsistente y contradictorio, y encima lo comunicas mal, caradura", disparó desde su cuenta de X.

Por su parte, Carlos Maslatón, uno de los fundadores de la Libertad Avanza, escribió un fuerte mensaje asegurando lo siguiente: "Caputo, ministro nefasto de un Gobierno nefasto, ahora viene con esta. Gran mentiroso eterno, no se animan ni él ni Milei a decir que sigue la inflación porque no paran de falsificar moneda pagando intereses desde el BCRA y fabricando deuda desde el BCRA y la Tesorería. Todo lo cual produce los mismos efectos que el empapelamiento físico de billetes", afirmó en su cuenta de X. Agregó Maslatón que "además de que no habrá demanda real de pesos mientras no permitan que su precio flote libremente contra las demás monedas. A diferencia de Milei, que nunca entendió qué es y cómo funciona el mercado, Caputo lo entiende por demás pero no hace lo que tiene que hacer porque está gobernando exclusivamente para el enriquecimiento del sector financiero a costa de la miseria del pueblo".

Con ciertos “actings” Milei pretende engañar a su electorado ya que no cumple con sus designios libertarios, además, ataca a la prensa y obstruye la libertad de expresión. Lo que perjudica a los ciudadanos, no a los medios o periodistas, a los ciudadanos a los que se les impide saber la verdadera verdad, y sacar sus propias conclusiones.

Quizás se olvide, ahora desde el sillón de Rivadavia, que fue la prensa la que le dio la posibilidad de hacerse conocido y llegar a la ciudadanía. De hecho, muchos de sus funcionarios fueron periodistas o columnistas del canal América y conoció a su ex novia en el programa televisivo de Mirtha Legrand. ¿Milei vive dos realidades?

La Asociación de Teleradiodifusoras Argentinas publicó el viernes pasado, un comunicado donde critica las descalificaciones de la gestión de Javier Milei hacia el periodismo.

La semana anterior, el periodista Jorge Lanata denunció penalmente a Javier Milei por haberlo llamado "ensobrado". Jorge Fontevecchia y Perfil también iniciaron cuatro juicios contra el Presidente después de sus repetidos ataques.

Los embates del jefe de Estado, de acuerdo con un comunicado difundido por la empresa periodística, se han producido "en coincidencia con las investigaciones y notas de opinión que fueron publicadas en el diario Perfil y en la revista Noticias sobre él y su fuerza política".

Las agresiones y ataques a la prensa afectan valores esenciales del sistema democrático, como lo es la libertad de expresión. En las sociedades contemporáneas, la televisión abierta cumple un rol fundamental para esa preservación de la pluralidad de ideas, opiniones e informaciones", manifestaron desde ATA.

A través del comunicado reforzaron desde la entidad que "las emisoras nucleadas en ATA prestamos un servicio de interés público gratuito con cobertura en todo el país: somos 23 canales de televisión abierta; representamos el 90% del encendido total y contribuimos a la identidad nacional, al federalismo y a la difusión cultural".

Para finalizar, los representantes de ATA concluyeron: "Es nuestro compromiso e instamos a las autoridades nacionales a continuar transitando el camino del diálogo y la tolerancia democrática bregando por la libertad de expresión y el respeto de los valores esenciales del sistema democrático".

Se da en el marco del cierre de ATC (Argentina Televisora Color) y la agencia de Noticias Télam, la más importante de América Latina con periodistas muy capaces. Un país serio necesita de una agencia de noticias que nuclee la información de lo que sucede en el país y en cada una de las provincias, que forman la Argentina.

Milei redobló la apuesta. El viernes pasado atacó a la periodista María Laura Santillán, con un video sacado de contexto. Dijo que la conductora de LN+ “banca a los políticos cualquier desmadre” y que es “cómplice”, en alusión a la suba de dietas de los senadores; en realidad, Santillán había cuestionado enfáticamente lo que pasó el jueves en el Congreso.

Esta costumbre de agredir a los periodistas, al arte, a la cultura y ahora a la educación pública y el derecho a manifestarse, se parece más a las metodologías de un represor, totalitario que a un libertario.

Los embates de Milei contra la cultura y el arte, como la educación pública y gratuita, atentan contra la identidad de este país. Pobre Don Domingo Faustino Sarmiento si viviera, o Juan Bautista Alberdi, entre otros. Mal asesorado o enfrascado en sí mismo, está muy sobrevalorado en el exterior, con sustento en el sufrimiento y sacrificios de los ciudadanos en los límites del interior del país. Un presidente que no pisa el barro de los barrios pobres, que no siente empatía por el más vulnerable y no le importa ni la educación, salud y cultura, ni la vida de los jubilados. Es un hombre que no honra a los argentinos que debe representar. Sigue siendo un outsider sin haber entendido o querer comprender de qué se trata la actividad pública.

Así pues, con la marcha prevista por universitarios y profesionales formados en las universidades estatales, se le termina a Milei el amorío con su electorado más joven y de 30 años para arriba. Es que sacar el subsidios a las universidades públicas y hospitales impacta de manera directa en la gente del estrato joven y de mediana edad que lo votó. Mañana martes habrá un abrazo a todas las universidades públicas del país. Milei ha tocado la columna vertebral de la historia argentina, la educación pública.

Se empieza a correr el velo de quien es realmente Javier Milei, aunque quiera hacer creer en cadena nacional que batió todos los records mundiales a cuatro meses de Gobierno. La gente no come vidrio. Todo sale a la luz, tarde o temprano.