
El gobernador Gustavo Sáenz recibió a ejecutivos de la minera para repasar la planificación del proyecto de cobre, oro y molibdeno. Con más del 80% de empleo y 89% de proveedores salteños ya activos en la etapa de estudios, Taca Taca se consolida como una oportunidad histórica para el desarrollo productivo y la economía de la Puna salteña.
Durante la reunión, la empresa presentó la planificación de las próximas etapas y destacó el potencial de Salta, que se consolida como una de las jurisdicciones mineras con mayor proyección del país.
En la reunión, de la que también participaron el ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo Ricardo Villada y el delegado de Casa de Salta Martín Plaza, se coincidió en que el proyecto Taca Taca es una oportunidad histórica por su capacidad de generar empleo, desarrollo local y encadenamientos productivos en toda la región.
Tras el encuentro, el Gobernador Sáenz destacó el impacto que el proyecto ya tiene en la economía local: en la etapa actual de estudios, en octubre, más del 80% del empleo y el 89% de los proveedores fueron salteños. “Seguimos apostando a inversiones que impulsen el desarrollo sostenible de Salta", afirmó el mandatario provincial.
Inversión récord
El Proyecto Taca Taca, ubicado en la Puna salteña, prevé una inversión inicial estimada en USD 3.600 millones y una vida útil proyectada de 32 años, con una producción anual de 250.000 toneladas de cobre, 125.000 onzas de oro y 3.500 toneladas de molibdeno.
El impacto en la creación de empleo será significativo: la etapa de construcción demandará más de 4.000 puestos de trabajo y, una vez en operación, se generarán alrededor de 2.000 empleos directos.
