Uno de los momentos que quedará en el corazón de muchos salteños ocurrió en Roma, cuando un grupo de estudiantes salteños fue recibido por el Santo Padre durante una audiencia papal. En el marco de su viaje de egresados, alumnos del Colegio San Pablo, del Colegio Salesiano y del Bachillerato Humanista Moderno se encontraron con Francisco en un momento de profunda emoción.

Al finalizar la audiencia, los jóvenes comenzaron a entonar el Himno al Señor del Milagro, lo que provocó que el Papa se acercara conmovido y los bendijera. Con palabras llenas de ternura y fe, les dijo:

"No se olviden del Señor, el Señor con su amor buscando el amor de un pueblo. Devuelvan con amor, el amor con el cual Él buscó al pueblo salteño".

Las lágrimas de los estudiantes y el gesto del Papa quedaron inmortalizados como un símbolo de fe, cercanía y devoción. No era la primera vez que Francisco mencionaba al Señor del Milagro: ya en 2013, durante una audiencia general, había saludado a estudiantes salteños que entonaban el himno en honor al Santo Patrono de Salta.

Hoy, el mundo despide al Papa Francisco con dolor y gratitud. Y Salta, en particular, lo recuerda no solo como el líder de la Iglesia, sino como el pastor que supo tocar los corazones de sus hijos, aun a miles de kilómetros de distancia.