El exministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social durante el gobierno de Carlos Menem, Armando Caro Figueroa, cuestionó con dureza la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional y aseguró que el objetivo central del proyecto es debilitar la estructura sindical.

En diálogo con Radio 750, Caro Figueroa afirmó que el texto enviado al Congreso por la administración de Javier Milei “no va en el sentido de resolver los problemas que tiene la Argentina ni en materia de empleo ni de producción”.

“Argentina necesita más libertad, más democracia y más transparencia sindical”, sostuvo el exfuncionario. Sin embargo, advirtió que la iniciativa oficial va en sentido contrario: “El Gobierno apunta a debilitar la estructura sindical, asfixiándola económicamente y restringiendo el derecho a huelga hasta límites que chocan con la Constitución Nacional y con los tratados internacionales”.

Caro Figueroa remarcó además que el problema del desempleo no es uniforme en el país y requiere políticas diferenciadas según cada región. “Una cosa es el norte, otra el centro y otra el sur. Eso exige tratamientos distintos que no se pueden resolver entre cuatro paredes ni conversando solo con una de las partes”, señaló.

En ese sentido, insistió en que cualquier reforma laboral debería construirse con la participación de todos los actores involucrados y no únicamente con el sector empresario. “Si se quiere discutir seriamente el empleo, hay que hacerlo con todos”, subrayó.

Por último, el exministro consideró que el Gobierno está utilizando el respaldo político obtenido en las últimas elecciones para avanzar con un objetivo que no responde a las necesidades del país. “Están buscando limitar el poder sindical y reducir el costo laboral, algo que va a beneficiar principalmente a las grandes empresas”, concluyó.