La Fuerza Aérea Argentina emitió un comunicado aclarando que los pilotos que ejecutaron la temeraria maniobra sobre Aeroparque en ocasión del arribo del nuevo avión presidencial, ahora matriculado como ARG-01, no son personal militar y se desligó de la responsabilidad.
El comunicado es respuesta a lo informado por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) que antes las críticas que generó la riegosa e innecesaria maniobra, había dicho que al tratarse de un avión oficial los pilotos tenían matrícula militar.
En su cuenta oficial de Twitter, la Fuerza Aérea sostuvo que “en relación a las publicaciones periodísticas referidas a las maniobras realizadas por los comandantes del ARG-01, se aclara que el ARG-01 se encuentra fuera del ámbito del Ministerio de Defensa y no es matrícula militar. La aeronave no es operada por personal de la Fuerza Aérea Argentina y depende de la Secretaría General de Presidencia”.
El intercambio de responsabilidades se inició a partir de que se supo que la Administración Nacional de Aviación Civil no aplicaría ninguna sanción a los pilotos ni a la controladora de la torre de Aeroparque, porque “el ARG-01 está fuera de la jurisdicción de ANAC por ser un avión oficial y los pilotos por haber usado matrícula militar”.