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José María “Pepe” Di Paola, sacerdote referente del movimiento de curas villeros y presidente de La Familia Grande Hogar de Cristo —federación que agrupa a centros barriales que abordan problemas de vulnerabilidad social y consumos problemáticos con el foco puesto en la persona y sus cualidades—, llegó a Salta en el marco de la Peregrinación 2022-2023.

Se trata de un recorrido nacional en el que la Federación visita distintas localidades del país buscando avanzar “hacia una Argentina sin droga y un país lleno de esperanza para los jóvenes”.

Al arribar a la provincia, el sacerdote fue recibido en Casa de Gobierno por el vicegobernador Antonio Marocco y el ministro de Seguridad y Justicia, Abel Cornejo. Por la tarde, antes de partir con destino al norte provincial para continuar con sus tareas, Di Paola dialogó con Punto Uno y sentó postura sobre algunos de los problemas que aquejan actualmente a la sociedad argentina.

¿Qué lo trae por Salta?

Quise visitar acá al vicegobernador Marocco, con quien nos conocemos y compartimos muchos amigos en común. Vine por un programa que tenemos, los Hogares de Cristo, y para contarle un poco sobre esta peregrinación que estamos haciendo por todo el país con el lema “Ni un pibe menos por la droga”. Y después voy a visitar la zona de la Diócesis de Orán.

¿Qué representa “Ni un pibe menos por la droga”?

Creo que “Ni un pibe menos por la droga” es uno de los temas que tenemos que aprovechar para trabajar con seriedad, porque si trabajamos en prevención y en recuperación, realmente vamos a trabajar en uno de los temas más importantes que tiene la Argentina y que puede unirnos a todos. Es uno de esos temas que puede unir a los argentinos, una causa común, porque son necesidades que la gente tiene en todos lados. Más allá de si sea una clase media o un barrio popular, o una clase alta, creo que en todos lados este tema es un problema y entre todos, si nos unimos, podemos trabajarlo haciendo carne aquello que Perón enseñaba como la Comunidad Organizada, y que lamentablemente la Argentina lo ha dejado de lado y se ha hecho una sociedad individualista y liberal.

El Papa Francisco dijo que después de la pandemia quedó claro que nadie se salva solo. Sin embargo, eso contrasta con la Argentina que usted acaba de describir. ¿Ve que hay posibilidades, que se activaron algunos mecanismos para empezar a cambiar eso?

Yo creo que sí, que hay posibilidades. Si hay algo en lo que no hay que caer es en el derrotismo. Creo que nosotros tenemos que incorporar el mensaje de Francisco, que es el nuevo líder mundial que realmente puede presentar un proyecto de comunidad que tiene claro que todos necesitamos del otro, cuando dice que los que tienen más tienen que compartir con los que tienen menos. En esa comunidad se plantea que el hombre está en el medio de la Creación, como lo dice Laudato Si’ en Fratelli Tutti y todas las encíclicas que el Papa nos ha compartido para que reflexionemos, no solamente los cristianos sino todos los hombres de buena voluntad.

En este último mes sucedieron varios episodios, siendo el más claro el atentado sufrido por la vicepresidenta Cristina Kirchner. ¿Qué reflexión hace sobre eso y sobre el clima de violencia que rodea a la política argentina?

Yo creo que es algo ajeno a la mentalidad de la popular. La popular sí la entiende a Cristina porque sufre lo mismo que sufrió ella. Yo lo dije en el Luna Park el otro día que nos reunimos los Hogares de Cristo y nos solidarizamos con lo que le pasó: Es conocer que las armas y las drogas, como dijimos en 2009 los curas, están en manos de cualquiera. Y más en grupos organizados que pueden transmitir todo este odio en la violencia.

Pero creo que nosotros podemos transmitir una sociedad diferente. Sobre esta violencia que genera más violencia, la presidenta fue clara en su discurso del otro día. Fue un mensaje de paz, diciendo inclusive a sus militantes que (al agresor) lo agarraron, lo redujeron, pero no ejercieron violencia. Y ese mensaje que dio me parece que es muy bueno: la violencia no es el camino. Creo que en eso hay, al menos de parte de la dirigencia en general, esa idea.