Gustavo Sáenz se refirió lo que dejó el resultado de las elecciones, su relación con el gobierno nacional, su enfrentamiento con los dirigentes libertarios en Salta y sobre cuál será su rol en la elección nacional de octubre.

Los candidatos del oficialismo cosecharon el 43% de los votos contra el 23% de los libertarios y se quedaron con la mayoría de las bancas, aunque perdió en la capital provincial.

Al respecto destacó que la diferencia de votos totales entre el espacio del gobernador y el que conduce Javier Milei. “El oficialismo provincial obtuvo 276.078 votos y el esquema libertario llegó a 147.191, una diferencia de 128.887 votos en toda la provincia”, resaltó en una entrevista en Infobae.

“Estamos conformes con la elección intermedia. Sabíamos que en estas elecciones el porcentaje de votantes baja bastante. Llegamos casi al 60% en toda la provincia. Contento porque son elecciones legislativas donde se renueva la mitad de las dos legislaturas. En este caso de los 12 senadores, ganamos 11 y de los 30 diputados, ganamos 20. Estoy conforme y contento con la elección”, declaró Sáenz a modo de introducción.

Dado que los resultados en la capital resulta evidente que hay condiciones para el crecimiento libertario, al respecto Sáenz advirtió: “ello depende del análisis que se haga. Lo mismo pasó en Rosario, en Santa Fe. En los grandes centros urbanos se nacionalizó la elección. Cosa que no ha sucedido en el área metropolitana de la provincia de Salta. Ganaron por cuatro puntos en capital. Si vamos al recuento final, el porcentaje del oficialismo fue del 43% de los votos totales que se emitieron y La Libertad Avanza sacó el 23%. Son 20 puntos de diferencia en toda la provincia. Esto lleva a que ellos tengan que hacer un análisis de cómo en la última elección Milei fue el más votado, con casi un 60%, y ahora bajó al 23%. Claramente los votos son de Milei y no de los que lo representan aquí. Fueron casi 130.000 votos de diferencia en toda la provincia”.

El mandatario contó que tras los comicios intercambió mensajes con Karina, “Toto” Caputo y Guillermo Francos quienes lo felicitaron: “no hay que asustarse con eso. Tenemos el 42% del electorado es de Salta capital y el otro 58% pertenece al resto de la provincia. Lo vamos a estudiar junto al intendente. Tendrá que rever algunas cosas y ver qué hacemos en el futuro. Tenemos elecciones nacionales en breve y después vienen las elecciones ejecutivas en dos años”.

Aseguró que aspira a que la relación de la provincia con el gobierno nacional continúe como hasta ahora: “dialogar y consensuar sin atacar a nadie. Sin insultos y sin agravios. Aquí en Salta no recibimos reciprocidad por los representantes del partido libertario. Al contrario. Todo es ataque y todo es insulto. Yo no la hago. Nosotros nos manejamos con propuestas, con gestión, trabajando. Si el gobierno nacional lidera y conduce, tendrá que hablar con sus representantes en Salta”, manifestó.

Luego agregó que le hizo saber al gobierno nacional de los ataques a su persona realizados por la dirigencia libertaria de la provincia: “Les dije: Si así tratan a los dialoguistas o los aliados, cómo tratarán a los enemigos”.

Consultado si la elección de ayer fue una disputa de sellos más que de candidatos y propuestas, el gobernador concluye que así fue en la capital salteña. “El candidato era poco conocido y también fue un mensaje de muchos para cambiar algunas cosas. Eso es lo que hay que leer. Ayer hablé con el gobernador de Jujuy y Chaco, lo importante es que los gobernadores seguimos, de una u otra forma, reafirmando nuestro liderazgo en cada una de las provincias, y ganando por márgenes importantes”.

“¿Se imagina buscando la reelección en el 2027 y enfrentando a LLA?” fue otra de las preguntas realizadas al mandatario. La respuesta fue “Yo me enfrenté al mundo. Desde el 2015 me vengo enfrentando al mundo. En el 2015 fui candidato a intendente contra el PRO, el kirchnerismo, con un partido provincial gané las elecciones. Fui candidato a gobernador contra el mundo y gané la elección”; aunque ahí nomás aclaró que para eso falta mucho. “Quiero terminar bien este mandato y cumplir con lo que me comprometí con la gente. Trato de no hacer futurología en política”.

Puesto a opinar sobre la elección nacional de octubre y la posibilidad de que él impulse candidatos propios, el mandatario respondió que siempre fue de “acordar con los distintos gobiernos, porque entiendo que necesitan legisladores que respondan a algún proyecto. Pero siempre aclaro que hay un límite y el límite son los intereses de Salta. Cuando afecten los intereses de los salteños, no van a contar con ese voto”.

Al final de la entrevista, el periodista de Infobae le remarcó al gobernador que en el discurso posterior a las elecciones se lo vio molesto por la intervención del PJ de Salta. Como ya lo había puntualizado en otras entrevistas, Sáenz considero que se trató de una medida autoritaria y arbitraria. “Después de la intervención el partido no sacó ni un concejal en la provincia”, puntualizo, para luego aclarar que “nunca” habló con Cristina Kirchner: “No hablé con ella ni cuando fue presidenta, ni cuando fue vicepresidenta, ni ahora que es presidenta del PJ Nacional. Nunca tuve relación con ella, ni la oportunidad de hablar. Pero si tengo la posibilidad de hablar con ella, le diría que ya es tiempo de renovación”.

“A Macri le diría lo mismo que a Cristina. Que se junten los dos y vayan a charlar cómo le fue en su gobierno a cada uno. Que hagan autocrítica. Un poquito, mínima, que se den un bañito de humildad y reconozcan que cometieron errores y que tuvieron su oportunidad. Y a Milei le digo que escuche y que no se enoje cuando opinen distinto. En los dirigentes políticos es muy importante la humildad y la grandeza. Es importante escuchar. Ninguno somos dueños de la verdad”, concluyó.