El presidente francés, Emmanuel Macron, fue reelegido en las elecciones celebradas ayer. En los comicios que lo ponen en un nuevo periodo al frente del Elíseo, Macron superó el 58,2 % de los votos en el balotaje, renovando su mandato por cinco años más.
A los 44 años, es el noveno presidente de la Quinta República, el primero reelegido después de Jacques Chirac, quien derrotó en 2002 al padre de Marine Le Pen, Jean-Marie Le Pen, fundador del Frente Nacional. Tras conocerse los primeros datos, una multitud salió con banderas francesas y europeas al Campo de Marte, bajo la Torre Eiffel, para celebrar la victoria de frente a la candidata nacionalista Marine Le Pen.
En su discurso, Macron reconoció el descontento de los franceses que votaron en el balotaje a la candidata de ultraderecha Marine Le Pen y prometió ser "el presidente de todos".
"A partir de ahora ya no soy el candidato de un sector sino el presidente de todos", dijo Macron en su primer discurso tras conocerse resultados preliminares de los comicios, que le garantizan un nuevo mandato quinquenal.
En el Campo de Marte, con la torre Eiffel de fondo, el jefe del Estado prometió un "método renovado" para gobernar el país tras un primer mandato marcado por las protestas, según las agencias de noticias AFP y Europa Press.
El presidente admitió "la cólera y los desacuerdos" que llevaron a millones de franceses a votar por Agrupación Nacional, la fuerza de ultraderecha que por primera vez reunió más de 40% de los votos.
En las últimas elecciones, en 2017, Macron y Le Pen también se midieron en segunda vuelta pero entonces el actual mandatario de centro obtuvo 66,1% de los sufragios y la dirigente de extrema derecha quedó con menos de 35%.
En su discurso de anoche, Macron reconoció que Francia atravesó momentos "dolorosos" y "difíciles" en un período de "transformación", y aseguró que el próximo mandato no será simplemente una "continuidad" del actual.
"Tenemos mucho que hacer, la guerra en Ucrania está ahí para recordarnos que atravesamos tiempos trágicos en los que Francia debe mostrar la claridad de su voz y desarrollar su fuerza en todos los ámbitos", dijo.
Agradeció a quienes lo votaron solo para "bloquear" el eventual acceso de la extrema derecha al gobierno e incluso a los que se abstuvieron de votar, a cuyo "silencio" prometió "responder".
Le Pen reconoció inmediatamente su derrota, incluso antes de que Macron pronunciara su mensaje, aunque sostuvo que el resultado representa para ella "una brillante victoria" y anticipó que continuará llevando adelante su "compromiso por Francia y los franceses".