Casi al mismo tiempo que la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) le informaba a la justicia penal que retiraba su acusación contra Cristóbal López y Fabián de Sousa, los empresarios lograban que el organismo le otorgue un plazo de varios años para cancelar la deuda por retención indebida de impuestos.
López y De Sousa comunicaron que consolidaron su deuda fiscal con dos planes de pagos que suman más de $12.700 millones y que deberán devolver durante los próximos años, con una tasa de interés fijada por debajo de la inflación. Detallaron que el primero de los planes de pago -basado en la moratoria que impulsó el gobierno de Alberto Fernández y que por primera vez incluyó a empresas quebradas y el impuesto a la transferencia a los combustibles-, superará los $12.000 millones y será a ocho años. El segundo plan, en tanto, ascenderá a $628 millones, a pagar durante cuatro años.
El informe lo presentó el abogado de Oil Combustibles, Eduardo Favier Dubois, quien precisó que ambos planes se consolidaron “en tiempo y forma”, en base al “régimen de facilidades dispuesto a través de la ley N° 27.541 de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en el Marco de la Emergencia Pública”.
Fabier Dubois detalló que el primer plan de pagos, identificado con el código P248907, abarcó su “deuda de impuestos, contribuciones de Seguridad Social, Autónomos y Monotributo” por un total de $12.055.278.292,52 a pagar en 97 cuotas que comenzarán a contarse el mes próximo, tras abonar $ 482,2 millones como “anticipo”. El segundo plan, identificado como P244775, abarcó deudas en “aportes de Seguridad Social, Retenciones y Percepciones Impositivas y RNSS”, por un total de $628.582.546,27 a pagar en 49 cuotas, desde el mes próximo, también con una tasa de interés del 2,84% mensual, tras haber pagado $25,1 millones como anticipo.
Todas las cuotas quedaron sujetas a una tasa de interés del 2,84% mensual, muy por debajo de la inflación interanual, que según el INDEC promedia entre 45 y 50 por ciento.