El Gobierno Nacional busca que en los estadios de fútbol de todo el país no haya exceso de público. Para eso se hará reunión virtual entre los ministros de Seguridad, Aníbal Fernández, de Salud, Carla Vizzotti y de Turismo y Deportes, Matías Lammens y las entidades deportivas encabezadas por la AFA.

Desde Casa Rosada se pedirá que haya un control extricto al aforo permitido del 50% de la capacidad de los estadios. Quienes no garanticen ese control, o directamente no quieran ejercerlo, deberán disputar los partidos sin público.

Es notoria la molestia que causaron en las autoridades del Gobierno las imágenes de este fin de semana, que mostraron tribunas repletas en varias canchas, especialmente en el superclásico entre River y Boca en el estadio Monumental. Desde River se informó que por los molinetes que se instalaron en las cercanías del estadio pasaron 36.787 personas, o sea apenas un puñado más de socios de los que estaban habilitados.

En contraste, los organismos de seguridad estimaron que hubo alrededor de 54.000 espectadores cuando la capacidad permitida era de 36.000, eso representa el 75% de la capacidad del estadio.

Para todos los encuentros de la fecha 14 de la Liga Profesional de Fútbol y también en las categorías de ascenso se habían pedido una serie de requisitos: tener al menos una dosis de alguna de las vacunas autorizadas contra el COVID-19 en el caso de los mayores de 18 años (el certificado se validaba a través de las páginas oficiales de cada club), asistir con la aplicación Cuidar y en caso de haberse vacunado en el exterior, tramitar una constancia para ser habilitado. En el caso de los menores, podían entrar sin esos requisitos.

Sin embargo en la mayoría de las canchas solamente se pidió el DNI a los espectadores.