Dejó un saldo de importantes daños materiales y personas afectadas, principalmente por la caída de árboles, inundaciones y la crecida de ríos y arroyos. El gobierno desplegó un operativo de asistencia para mitigar los efectos del temporal.
La ciudad de Tartagal fue una de las más afectadas por el paso de la tormenta. Los fuertes vientos y lluvias provocaron la caída de árboles de gran porte, que afectaron directamente el tendido eléctrico en varias zonas de la ciudad, especialmente en la calle Richieri y en el barrio Tomás Sánchez. Esta situación dejó a varios sectores de la ciudad sin suministro de energía eléctrica por algunas horas, dificultando las tareas de auxilio y movilización de los equipos de emergencia.
En el municipio de General Mosconi, el temporal causó estragos en el asentamiento del Carmen, donde una familia fue asistida debido al ingreso de agua a su vivienda. Este fenómeno, frecuente en esta época del año, generó preocupación entre los residentes de la zona. Afortunadamente, se contó con la rápida intervención de las autoridades locales y Bomberos Voluntarios, quienes trabajaron de manera conjunta para evitar mayores complicaciones y brindar las primeras asistencias.
Coronel Cornejo: inundaciones sin evacuados, pero con calles intransitables
En Coronel Cornejo, las intensas lluvias provocaron inundaciones en diversas zonas, especialmente en la Misión El Molle, donde cuatro familias se vieron afectadas por la acumulación de agua en sus viviendas y las calles intransitables. A pesar de la magnitud de los daños, no fue necesario realizar evacuaciones, aunque las autoridades locales brindaron asistencia a las familias afectadas en el lugar. Se dispuso de vehículos de apoyo y recursos para aliviar la situación de los damnificados y garantizar su seguridad.
Capital: derrumbes y asistencia preventiva a familias vulnerables
En la capital provincial, la tormenta generó preocupación en la zona sudeste de la ciudad, especialmente en el asentamiento 4 de Julio, donde una familia residente en una vivienda precaria ubicada al margen del río fue trasladada preventivamente debido al riesgo de derrumbe. La crecida de los cauces cercanos y la inestabilidad del terreno aumentaban el peligro para los habitantes de esta zona. La familia fue trasladada a la casa de un familiar, mientras las autoridades locales coordinaban acciones para evitar mayores complicaciones.
Simultáneamente, en el barrio 13 de Abril, también en la zona sur de la ciudad, se realizó un relevamiento de las viviendas afectadas por el temporal. El Municipio colaboró con los organismos de emergencia para brindar ayuda inmediata a las familias que habían sufrido daños materiales debido a las intensas lluvias. Se distribuyó agua potable, alimentos no perecederos y materiales de primera necesidad para mitigar los efectos de la tormenta.
San Lorenzo, Vaqueros y Valle de Lerma: rescate en medio de la crecida del río
En el municipio de San Lorenzo, los habitantes del barrio Los Paraísos se vieron afectados por la rápida acumulación de agua que ingresó a sus viviendas. Las autoridades locales implementaron un operativo para asistir a las personas afectadas, asegurando su traslado a lugares seguros y la provisión de recursos básicos como agua potable y alimentos.
En Vaqueros, el nivel del río Wierna alcanzó su punto máximo debido a las lluvias, provocando que una familia fuera trasladada al Complejo Municipal de la localidad para su resguardo. La crecida del río puso en alerta a los residentes de las zonas cercanas, y las autoridades permanecen en constante monitoreo de la situación.
En el Valle de Lerma, las fuertes lluvias y la crecida de arroyos causaron complicaciones adicionales, con vehículos varados debido al aumento del caudal de los afluentes del rio Toro. Las autoridades realizaron varios rescates y se encargaron de evacuar a los conductores atrapados en la zona. Además, se realizaron tareas de asistencia a los habitantes afectados por las inundaciones y la caída de árboles, que interrumpieron la circulación en diversas arterias principales de la región.
Rutas nacionales
Uno de los mayores desafíos provocados por el temporal fueron los daños en las rutas nacionales. En las localidades de Payogasta y La Poma, se llevaron a cabo relevamientos de las rutas afectadas, con el objetivo de identificar las zonas más críticas y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad vial.
La Ruta Nacional 40, en su tramo norte, quedó intransitable debido a la crecida de los ríos Potrero y Blanco, lo que complicó el tránsito de vehículos en esta importante vía de comunicación. Por su parte, la Ruta Nacional 51, que conecta Campo Quijano con San Antonio de los Cobres, sólo está habilitada para tránsito liviano hasta las 18 horas, mientras que el tramo San Antonio de los Cobres-Paso de Sico permanece transitable con precaución.
La Dirección General de Seguridad Vial, en coordinación con otras áreas policiales y organismos de emergencia, sigue trabajando de manera preventiva en la señalización de rutas y en la orientación a los conductores para evitar accidentes. Las autoridades también han implementado medidas de restricción para garantizar que solo vehículos livianos transiten por las zonas más afectadas.
Asistencia en la Quebrada del Toro
Uno de los puntos más afectados por el temporal fue la Quebrada del Toro, en el norte de la provincia, donde las condiciones climáticas empeoraron a lo largo del fin de semana. Desde la Dirección General de Emergencia se informó que se entregaron suministros esenciales como alimentos, agua, pañales, frazadas y plásticos a las familias que se encontraban en la zona.
El viernes, el ministro de Desarrollo Social, Mario Mimessi, se reunió con el intendente de Campo Quijano, Lino Yonar, para coordinar una nueva entrega de recursos a las familias afectadas. A su vez, el sábado, el ministro recorrió varios parajes de la Quebrada del Toro, donde visitó personalmente a las familias afectadas y entregó artículos de primera necesidad.
En total, se distribuyeron 493 bidones de agua de 6 litros, 153 módulos alimentarios, 22 rollos plásticos, 20 paquetes de pañales, 15 depósitos de agua segura, 20 camas, 20 chapas, 30 colchones y 150 frazadas. Estas entregas, junto con las visitas a las familias damnificadas, tienen como objetivo aliviar la difícil situación que atraviesan los habitantes de la región.