Una intensa tormenta azotó la ciudad de Salta y localidades de alrededores el lunes, dejando como resultado 55 mm de lluvia en pocas horas, lo que causó importantes perjuicios en varias localidades de la provincia, especialmente en el Valle de Lerma y el Valle Calchaquí.
Además de las intensas precipitaciones, la tormenta estuvo acompañada por actividad eléctrica, que se sintió con mayor fuerza en el sur del Valle de Lerma.
Según el informe oficial, las lluvias fueron tan intensas que en algunas zonas cayeron más de 50 mm en tan solo cuatro horas, una cantidad que triplica la media histórica registrada en los últimos 30 años. Este fenómeno meteorológico afectó tanto la infraestructura de la ciudad como a las viviendas de los salteños, y se espera que la inestabilidad persista durante toda la semana.
Daños en viviendas, calles y rutas
Los daños fueron significativos. En las localidades más afectadas, como Salta Capital, Rosario de Lerma, Cerrillos, La Merced, La Silleta y Payogasta, se registraron caídas de árboles, postes de luz y cortes en el suministro eléctrico. La lluvia provocó inundaciones en varias calles, lo que generó serios inconvenientes para la circulación vehicular, sobre todo en zonas bajas.
En la Cerámica del Norte se derrumbó una pared. En el barrio San Fernando, una antena también colapsó, lo que causó más dificultades en el área. Además, las lluvias anegaron viviendas y, en algunas zonas, las rutas quedaron bloqueadas por la caída de árboles y escombros. La Ruta 33, a la altura del kilómetro 27 (Pulares), debió ser cerrada al tránsito, mientras que las rutas 58 y 6 fueron habilitadas con precaución.
El sistema de emergencias 911 recibió numerosos llamados desde las 15:00 horas, reportando sobre todo inundaciones y caída de árboles en distintas partes de la ciudad. A pesar de la magnitud de la tormenta, no se registraron evacuaciones, pero el trabajo conjunto entre Defensa Civil, bomberos, la Policía de Salta y los municipios de las áreas afectadas fue clave para mitigar las consecuencias.