Con pulseadas en todas las secciones y una negociación que no se toma descanso, el peronismo bonaerense acelera el cierre de listas bajo el nuevo frente. En un mapa atravesado por internas, kicillofistas, kirchneristas y massistas buscan sostener la unidad y retener poder territorial en su histórico bastión electoral.
Con el reloj acercándose al cierre de listas previsto para la medianoche del próximo sábado, el peronismo bonaerense apura definiciones bajo el paraguas de Fuerza Patria para las elecciones desdobladas del 7 de septiembre. En un contexto de pujas internas y nuevos equilibrios de poder, el armado busca mantener la unidad sin resignar competitividad en las ocho secciones electorales. El reparto entre kicillofistas, kirchneristas y massistas se cocina en una ingeniería política que combina territorio, lealtades y cálculo electoral.
En ese marco, el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, confirmó ayer que “la semana pasada presentamos la alianza Fuerza Patria, integrada por distintos sectores del peronismo y del campo popular para las elecciones de septiembre y octubre”, y aseguró que “estamos trabajando esta semana en la confección de las listas” con el objetivo de “buscar a los candidatos más representativos y competitivos en una elección clave”.
Por estas horas, algunas voces aseguran que el kirchnerismo se quedaría con el primer lugar de la boleta en la estratégica Tercera sección, el bastión del conurbano sur, mientras que el kicillofismo encabezaría en la Primera, donde se espera una pulseada más reñida con la oposición. El Frente Renovador, en tanto, concentrará su poder de fuego en el interior, aunque también aspira a lugares en las listas seccionales y nacionales.
En la Primera sección -que incluye el norte y oeste del conurbano- se juega una de las partidas más importantes. Con la posible candidatura de Julio Zamora, intendente de Tigre, como carta fuerte de la oposición de centro en Somos Buenos Aires -peronistas no K, junto a radicales, socialistas y el GEN- el oficialismo bonaerense discute nombres con peso territorial.
Allí, el gobernador Axel Kicillof podría impulsar al ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis como nombre fuerte, mientras que el camporismo promueve al jefe comunal de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini. Y también aparece como opción de consenso el intendente de Pilar, Federico Achával, de buena sintonía con Máximo Kirchner.
El sur del conurbano sigue siendo el núcleo duro del peronismo. En la Tercera sección, Fuerza Patria apuesta a consolidar ventajas que compensen posibles tropiezos en otras zonas. Los nombres en danza son de peso: los alcaldes Mariano Cascallares (Almirante Brown) por el Movimiento Derecho al Futuro y Mayra Mendoza (Quilmes) por el kirchnerismo. La vicegobernadora Verónica Magario aparece como opción de alto perfil para reforzar la boleta si el escenario se complica. También suenan los mandamases de Florencio Varela, Andrés Watson, y de San Vicente, Nicolás Mantegazza.
En la Cuarta sección, el terreno se anticipa difícil. Con una oposición que reúne al radicalismo, el randazzismo, el dirigente de Emilio Monzó y referentes locales como Gilberto Alegre (Villegas) y Guillermo Britos (Chivilcoy), el PJ busca hacer pie. Aunque todavía no hay nombres confirmados, Sergio Massa tendrá influencia directa sobre las candidaturas en esta región, donde cuenta con varios intendentes propios.
En la Quinta, la disputa viene caliente. Es casi un hecho que el intendente pro-libertario Guillermo Montenegro de Mar del Plata encabezará la lista de senadores provinciales, lo que obliga al peronismo a presentar una boleta potente. El camporismo empuja a la extitular de la Anses, Fernanda Raverta, mientras que desde el kicillofismo se anotan el intendente Gustavo Barrera (Villa Gesell) y el exalcalde Jorge “Pitingo” Paredi (Mar Chiquita). El massismo podría sumar a Juan Manuel Cheppi.
Algunas voces indican que será Kicillof quien designe la cabeza de la lista en la Segunda sección, que podría ser para el intendente de Salto, Ricardo Alessandro; mientras que Massa lo hará en la Sexta y Máximo en la Séptima. En tanto, en la sección Capital se prevé que podrán renovar los tres diputados que terminan su mandato: Ariel Archanco, encolumnado en el Instituto Patria; Lucía Iañez, del espacio del gobernador y Juan Malpeli, del Frente Renovador.
En la conferencia, Bianco precisó que el mecanismo de definición de candidaturas incluye a los intendentes en los municipios donde gobierna el peronismo, quienes “incorporarán a los distintos sectores a las listas con generosidad”, mientras que en los distritos opositores “los compañeros están juntándose para definir a los candidatos que mejor representen a nuestra fuerza política”.
También subrayó que “hay que evitar que siga ingresando la motosierra a la provincia de Buenos Aires” y advirtió que “lo más inteligente que podemos hacer es poner a los mejores candidatos, los más competitivos, los que más miden para asegurar más votos y poner freno a las prácticas antidemocráticas del gobierno, como la condena a Cristina Kirchner sin pruebas; la persecución a militantes y los ataques al Congreso”.
Legisladores nacionales
La lista de diputados nacionales de octubre también se define entre equilibrios. Se menciona al dirigente social Juan Grabois, impulsado por el kirchnerismo, y a la presidenta del bloque de Senadores provinciales del peronismo, Teresa García. Por el lado del gobernador, suenan la jefa de Asesores, Cristina Álvarez Rodríguez, y el exintendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo. Desde el FR niegan que Massa tenga intención de liderar la boleta, aunque su peso en la negociación es indiscutible. Tampoco se descarta la figura de Achával para la competencia de octubre.
"No estamos conversando nombres, pero sí representaciones de cada espacio", confió un referente del Movimiento Derecho al Futuro sobre la confección de la grilla de diputados nacionales y destacó que "muchos sectores piden espacios, como los gremios o los movimientos sociales, y los lugares son pocos, por lo que todos trataremos de alcanzar equilibrios".
En el Conurbano, donde se concentra la mayor parte del electorado, el peronismo juega fuerte para contrarrestar un posible retroceso en el interior. Como siempre, los nombres definitivos recién se conocerán a las 23.59 del 19 de julio, cuando se cierre el plazo para oficializar candidaturas. Hasta entonces, todo puede cambiar: el escenario es dinámico, las negociaciones siguen abiertas y los nombres que hoy figuran en los borradores podrían quedar afuera o escalar posiciones en cuestión de horas. En la rosca pejotista, nada está cerrado hasta que vence el último minuto.