El cura Agustín Rosa Torino fue condenado a la pena de 12 años de prisión efectiva por la comisión del delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por ser ministro de culto reconocido en perjuicio de dos víctimas y por abuso sexual simple agravado en perjuicio de otra persona.
Lo resolvió la Sala IV del Tribunal de Juicio integrada por los jueces Maximiliano Troyano, Norma Beatriz Vera y Roberto Faustino Lezcano. El Tribunal dispuso la prisión preventiva de Rosa Torino y ordenaron su inmediata detención y traslado a la Unidad Carcelaria 1, donde será evaluado en el servicio de sanidad. Recomendaron al director del Servicio Penitenciario que se le brinde al imputado tratamiento psicológico por la naturaleza de los hechos por los cuales resultó condenado.
Los jueces no hicieron lugar a los planteos expuestos por la defensa de Rosa Torino al momento de los alegatos, y rechazaron la prescripción de los hechos denunciados. El tribunal ordenó la toma de fotografías del condenado y la realización de un examen genético para su posterior inscripción en el banco de datos y registros correspondientes.
La fiscal Verónica Simesen de Bielke había solicitado para Rosa Torino la pena de 22 años de prisión efectiva, mientras que la defensa del cura, los abogados Humberto Oliver y Fabio Núñez, había pedido la absolución del acusado.
Agustín Rosa Torino se declaró inocente de todas las "acusaciones y mentiras", manifestando que el objetivo de las acusaciones en su cotra fue un complot para destruir su obra.