06 15 unsa

La Universidad Nacional de Salta atraviesa un momento delicado que no pasa desapercibido para nadie. Con un déficit anual proyectado de $2700 millones y las recientes decisiones del rector Miguel Nina y la incorporación de un nuevo auditor interno, Roger Leguizamón, marcan el inicio de una etapa que, al parecer, no será fácil para la Casa de Altos Estudios salteña.

En palabras del propio rector Miguel Nina, el déficit actual alcanza los 950 millones de pesos, y la mayor parte de esa deuda —el 95%— está vinculada al pago de sueldos y salarios.

“Si no contenemos el déficit, va a seguir creciendo”, advirtió Nina, dejando claro que la situación es crítica. Sin embargo, el origen de este déficit no es solo una cuestión de gastos incontrolables, sino de decisiones previas que hoy se están pagando caro.

En una entrevista con nuestro diario, Nina explicó que los recursos destinados a cargos importantes, como los de la tecnicatura de Joaquín V. González y San Antonio de los Cobres, fueron perdidos debido a la falta de renovación de convenios con el gobierno nacional. “La Universidad no puede seguir financiando estos cargos de su propio bolsillo”, subrayó.

 

Auditor nuevo

Para enfrentar este torbellino financiero, la universidad decidió incorporar a un nuevo Auditor Interno, Roger Walter Leguizamón, un economista con trayectoria en auditorías públicas y privadas, que llega con la misión de devolverle a la UNSa un poco de orden y transparencia.

“Lo que vamos a hacer es elaborar un plan de auditoría propio para la UNSa”, dijo Leguizamón, quien además remarcó que el Consejo Superior será el encargado de aprobar el plan anual de auditoría. “Nosotros seremos quienes decidiremos qué auditar, cómo y por qué. Vamos a planificar todo de manera clara”, destacó el nuevo auditor.

De todos modos, es indiscutible que una gestión más rigurosa es imprescindible para evitar que las cuentas de la universidad sigan desbordándose: ¿será

 

Contratos de baja

Otro de los puntos delicados es que se dieron de baja cargos políticos de la gestión anterior: “esto no son despidos, son finalizaciones de contratos que ya estaban vencidos”.

A pesar de la molestia de varios sectores, el rector dejó claro que esta medida fue tomada por criterios técnicos, administrativos y legales.

 

Ex rector se defendió

Por si fuera poco, el ex rector de la UNSa, Daniel Hoyos, salió al cruce de las acusaciones sobre el mal manejo de los fondos durante su gestión. Uno de los puntos más discutidos fue la inversión en la nueva página web institucional, que se dijo costó 15 millones de pesos. Hoyos aclaró que esta cifra, y otros gastos en equipamiento, no fueron dinero público. “Todo esto fue financiado con donaciones privadas del Banco Patagonia”, explicó en declaraciones en FM Aries.

Según Hoyos, en el marco de una licitación para manejar las cuentas de la universidad, el banco ofreció importantes donaciones como parte del acuerdo. La suma total de las donaciones habría sido de 200 millones de pesos, que luego se invirtieron en un plazo fijo y multiplicaron para financiar compras de vehículos, equipos informáticos y la página web.

 

Un futuro incierto

Lo que está claro es que la Universidad Nacional de Salta se encuentra ante una encrucijada financiera. Entre la necesidad de reestructurar sus cuentas, el nombramiento de nuevos auditores y la polémica con la gestión pasada, lo único que parece cierto es que el tiempo apremia. ¿Podrá la UNSa salir de esta crisis? ¿Serán suficientes las decisiones que se tomen ahora para recuperar el equilibrio financiero y mejorar la administración de los recursos?