Natalia Aguiar
El periodismo en la vida diaria de los ciudadanos es de suma importancia, porque permite conocer, saber, informarse, pero también el periodismo libre y profesional es el eje de una democracia sólida. Por eso es cada vez más difícil hacer periodismo en Argentina, y en el mundo.
Ser un periodista independiente es una profesión de riesgo en la que cada profesional pone mucho esfuerzo, trabajo, y hasta arriesga su vida. Es un oficio, y cuando digo oficio me refiero a la pasión que requiere el ejercicio de la profesión de periodista.
Enfrentar a los poderosos no es cosa fácil. Ya sean empresarios, políticos, funcionarios públicos y hasta el mismísimo presidente de un país. Se requiere de mucha valentía y confianza en las creencias personales. Se requiere de mucha valentía para defender la verdad. Porque esas verdades afectan y pueden cambiar las vidas, los destinos de las personas. Se requiere de mucho coraje para defender lo que debe ser.
Desde mi óptica, le periodismo libre y serio defiende a las comunidades vulnerables, a las minorías, a los niños, a los abuelos, a los que no tienen voz.
Lo mismo ocurre a nivel medios de comunicación. La gente, los ciudadanos, los lectores, los seguidores, los televidentes, saben bien cuáles medios y cuáles periodistas trabajan con la seriedad del caso. También existen operadores y operados, pero de ellos la gente también sabe, conoce, se da cuenta.
Ante los avances tecnológicos y los nuevos desafíos en la comunicación cada vez más inmediata, se requiere mayor profesionalismo. Además, las nuevas herramientas colaboran con la profesión, como la digitalización y la internet, que difunden a mayor cantidad de personas la información.
Para muchos, el periodismo es el cuarto poder. Y ha colaborado para develar injusticias, actos de corrupción y abusos del poder. De hecho, el día del periodista se festeja el 7 de Junio, porque ese día pero de 1810, Mariano Moreno, tomó una decisión clave para el futuro del periodismo: el abogado y político fundó la "Gazeta de Buenos Ayres", el primer periódico de la etapa independentista argentina.
Más tarde, el 25 de mayo de 1938 en el Primer Congreso de Periodistas, en la ciudad de Córdoba, los hombres de prensa de todo el país decidieron instituir como Día del Periodista el 7 de junio. Así pues, "La Gazeta de Buenos Ayres, no solo fue el primer diario argentino sino que también inauguró la libertad de prensa en América". Allí se escribieron las bases del Estatuto del Periodista Profesional, ley 12-908, sancionado por el Congreso Nacional.
Alerta
El periodismo serio, crítico y libre está en riesgo en la actualidad. “Hacer periodismo profesional tiene consecuencias. No hacerlo tiene muchas más”. Ese es el slogan de la campaña de comunicación que el viernes pasado se lanzó en la sede de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), en un evento con representantes de medios, periodistas y referentes del ámbito académico.
La campaña impulsada por ADEPA junto a la Asociación de Teleradiodifusoras Argentinas (ATA) y la Asociación de Radiodifusoras Argentinas (ARPA), destaca el valor del periodismo desde dos ejes: su importancia como productor de información verificada y rigurosa, y el coraje de quienes lo ejercen, muchas veces en contextos hostiles. Además explicaron que las piezas creadas por la agencia Almacén comenzaron a publicarse desde el sábado, 7 de junio, cuando se celebró en Argentina el día del periodista.
Martín Etchevers, presidente de ADEPA, aludió al desafío que enfrenta la sustentabilidad del periodismo ante el uso de los contenidos por parte de las plataformas tecnológicas sin respetar la propiedad intelectual. También a la proliferación de contenido falso en el ecosistema digital y el creciente riesgo de la desinformación. “Vivimos en una época de algoritmos opacos, burbujas de sentido y fake news. El periodismo es hoy más necesario que nunca para garantizar un debate público basado en hechos”, sostuvo.
En tanto,Daniel Dessein, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa de ADEPA, subrayó que “el periodismo argentino, a pesar de ser cuestionado localmente, es reconocido internacionalmente por su innovación y rigor”, destacando los recientes premios obtenidos por medios argentinos en la conferencia global de WAN-IFRA. “Nuestro país -agregó Dessein– tiene las redacciones más modernas de América Latina, y nuestros medios detentan excelentes métricas y cifras de suscripciones”.
Finalmente, Eugenio Sosa Mendoza, presidente de ATA, destacó el trabajo que hace el periodismo argentino para generar un clima de convivencia democrática en el país, en un contexto que describió como “de fuertes desafíos frente a intentos de desacreditación y pronósticos no siempre positivos sobre el impacto que tenemos en la sociedad”.
Presentaron un estudio de la consultora Trends que detalla que en el 61,9% de la ciudadanía, los medios masivos representan en conjunto la principal fuente de información. Esa alta proporción surge del consumo de canales de noticias (25,6%), noticias de TV abierta (20,3%), diarios en papel y en formato digital (10,5%), canales de streaming (5,9%), radios AM (3%) y emisoras FM (2,5%).
Las redes sociales, por su parte, aparecen con el 28,5%. Dentro de este porcentaje, el principal consumo de las redes son las cuentas de los medios de comunicación tradicionales (40,7%) y las cuentas de periodistas (25,1%). En conjunto, muestran que el 65,8% recurre, en las redes, a los medios masivos y a los periodistas más confiables para acceder a las noticias o contrastar la información que recibe por otras vías. El 24,2% se informa por canales de políticos o figuras públicas y el 20,7% se informa por sitios de youtube dedicados a la política o noticias. Apenas el 18% se guía por creadores de contenidos o influencers que hablan de actualidad.
La encuesta revela que la confianza en los medios de comunicación asciende al 59,1%. Además, el 59,6% entiende que la credibilidad y confiabilidad de la información son los elementos más relevantes a la hora de elegir un medio de comunicación.
“Los datos nos marcan que el periodismo sigue siendo un valor fundamental en la sociedad, al visibilizar problemas y ponerlos en la agenda para que otros actores institucionales trabajen en las soluciones”, resumió Etchevers.
Revés judicial
Hace unos días la Justicia desestimó la denuncia de Javier Milei contra los periodistas Ari Liljalad y Carlos Pagni al considerar que sus expresiones están amparadas por el derecho a la libertad de prensa y no constituyen delito alguno.
El juez federal Daniel Rafecas consideró que lo dicho por los periodistas en El Destape y el programa Odisea de LN+, se enmarcan dentro del derecho a la libertad de expresión y consideró que “utilizar el ámbito penal para perseguir opiniones periodísticas pondría en riesgo el debate democrático”.
En esa línea, Rafecas argumentó que "la divulgación de expresiones sobre asuntos de interés público no puede ser criminalizada ni se encuentra prohibida ni constituye actividad ilícita y se encuentra además amparada por el derecho a la libre expresión y de jerarquía constitucional que resultan de ineludible aplicación al caso y cuya desatención puede incluso generar responsabilidad internacional de nuestro Estado".
Según el informe 2024 del Monitoreo de la Libertad de Expresión del Foro de Periodismo Argentino (FOPEA), los ataques al periodismo crecieron un 53% en relación al 2023 y un 103% en comparación con 2022. Lo grave de la cuestión es que el poder político argentino fue el principal responsable de las agresiones contra periodistas durante 2024, representando el 52,5% de los 179 ataques detectados en todo el país. Del análisis se desprende que el presidente Javier Milei protagonizó 56 de los episodios denunciados, mayoritariamente a través de discursos estigmatizantes, agravios o insultos.
Por más periodismo libre, veraz y cercano a la gente. El periodismo se debe al ciudadano. El poder está de paso. El periodismo serio cambia la historia.