02 16 cornejo744

Por Martín Miguel Güemes Arruabarrena

Falleció en Salta el ex gobernador, Contador Público Nacional Hernán Hipólito Cornejo Barni, estimado compatriota, compañero y amigo perteneciente a una familia de antiguo arraigo salteño. Fueron dueños y creadores del primer ingenio azucarero del país, el ingenio San Isidro.

De estirpe norteña volcada a la vida pública, el Dr. Julio Cornejo, abuelo de Hernán fue gobernador radical yrigoyenista depuesto por la revolución del 6 de setiembre de 1930. El Dr. Lucio Alfredo Cornejo, tío de Hernán fue el primer gobernador peronista de Salta (1946 – 1949) y su padre, el Dr. Juan Carlos Cornejo Linares, nacionalista de fuste, fue senador nacional justicialista.

Desde joven Hernán abrazó la causa del movimiento nacional. Luchó en su juventud y en su temprana madurez llegó a la gobernación de la provincia de Salta. Le tocaron tiempos difíciles, internos y externos, nacionales e internacionales, pero con paciencia, serenidad y firmeza pudo concluir su mandato con honradez y eficiencia, sin demagogia ni concesiones estériles. Asumió otros cargos, a nivel nacional fue Secretario de Seguridad Social en el Ministerio de Trabajo, embajador en Ecuador y Parlamentario del MERCOSUR.

Tuve el honor de ser designado Director de la Casa de Salta durante su mandato popular. Compartimos alegrías y esperanzas a través del tiempo que nos tocó vivir. Tres circunstancias vividas me vienen al recuerdo. La primera fue reveladora de la cultura del estimado Hernán. Fue en un viaje a Salta cuando el laureado escritor Abel Posse nos invitó a almorzar a su casa de San Lorenzo. Fue una sobremesa chispeante de conocimientos compartidos entre el político y el intelectual, lo cual no es común.

La segunda fue la generosidad de Hernán al invitarme y aceptar presentar mi libro sobre Güemes en el Cabildo de Salta. Sus conocimientos históricos estaban en su sangre y así lo demostró en la ocasión junto al doctor Abel Fleming.

Como embajador en el Ecuador formó conciencia sanmartiniana creando una revista divulgativa del pensamiento y la acción del libertador.

Por último, en el curso de su enfermedad terminal escribió y publicó sus memorias, A vuelo de pájaro, que con particular emoción recibí con una afectuosa dedicatoria que transcribo textualmente: “Para mi querido amigo y compañero Martín Miguel Güemes Arruabarrena con el afecto de siempre, Hernán, 7 de enero de 2024”. Al leer sus páginas de vida recordaré al querido pariente y amigo con el afecto de siempre, que en paz descanse.

El maestro del Revisionismo argentino, profesor Vicente Sierra, católico, hispanista y justicialista, con este llamado a la auténtica libertad interpreta bien al amigo que se nos fue, la querencia y la identidad de este salteño, argentino y sudamericano de bien, que se nos fue a la eternidad.

Dice Vicente Sierra: “el hombre argentino debe liberarse retornando a las raíces”