El Consejo Superior de la Universidad Nacional de Salta, por iniciativa de la Secretaria de Cultura de la Provincia y PRO Cultura Salta, hizo entrega de la reconocida distinción al artista salteño, historia viva del bandoneón.
Dino Saluzzi extendió los límites del repertorio dotándolo de libertad creativa absoluta inscrito en las más diversas formaciones musicales. Desde música para bandoneón solo hasta música sinfónica, la obra de Saluzzi marca la historia del bandoneón no sólo por su forma de componer sino también por la manera de tocar el instrumento.
“Nunca me olvidé de dónde vengo”, expresó apenas recibió el Título de la mano del rector de la Universidad Nacional de Salta, Daniel Hoyos. El artista agradeció el gesto y dijo estar en un sueño, sobre todo por todas las sensaciones “que están pasando por mi corazón ahora”. Aferrado a su entrañable Campo Santo, celebró haber nacido “por estas latitudes, que tiene que ver con Los Andes, con Latinoamérica toda, y con el deseo de crecer”.
Mediante la Resolución del Consejo Superior 150/24, el artista Timoteo “Dino” Saluzzi fue distinguido con el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad Nacional de Salta, “en reconocimiento de su vasta trayectoria, nacional e internacional, llevando su arte compositivo en la música popular y académica de manera individual, familiar y plasmada en sus presentaciones mundiales”, según dicta el artículo 1 de la disposición. Cabe destacar que la propuesta fue elaborada en conjunto por el Secretario de Cultura de la Provincia de Salta, Diego Ashur, y el Presidente de Pro Cultura Salta, Roberto Salvatierra.
Durante su alocución, el rector de la Universidad Nacional de Salta, Daniel Hoyos, detalló que la obra del artista: “Ha inspirado a grandes músicos nacionales como Astor Piazzolla, Los Chalchaleros, León Gieco, Piero, entre muchos otros artistas, Dino siempre tuvo la mente puesta en la música y en llevar nuestra cultura salteña hacia lo más alto. El título Honoris Causa que conferimos hoy, es el mayor reconocimiento de nuestra universidad a un artista por su trayectoria y herencia cultural”.
Nunca se olvidó de Salta
Durante el acto, el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de la Provincia acompañó la distinción con una placa en reconocimiento a la trayectoria del artista y la entrega simbólica de un manual de educación primaria que homenajea su obra. La titular del ministerio, Cristina Fiore Viñales, manifestó: “Dino nos contaba que nunca se olvidó de Salta y me llegó al corazón. Nunca se olvidó de Salta, nunca se olvidó de Campo Santo y, a través de este acto, hoy nosotros le decimos que tampoco lo hemos olvidado a él. Por eso, les quería contar desde el Gobierno de la Provincia, repartimos más de 245.000 manuales a estudiantes y en uno de ellos, en el de quinto grado, quisimos hacer un homenaje a Don “Dino” Saluzzi para que nuestros niños, nuestras niñas, compartan el orgullo de decir que en su hermosa tierra pudo germinar una semilla tan prolífica como Dino Saluzzi”.
Asimismo, Diego Ashur, secretario de Cultura de la Provincia, sostuvo: “Nos parecía que hacía falta este reconocimiento hacia el maestro Saluzzi. En él reconocemos la importancia de aquellos artistas que quieren innovar desde su arte como lo hizo él, atreverse a una música universal más allá de las críticas infundadas y animarse a trascender. Este reconocimiento que hoy celebramos, es un reconocimiento a la vuelta de un larguísimo y fructífero camino que nos demuestra la importancia de innovar, reconociendo en la música de Dino Saluzzi un importante recurso artístico, hoy patrimonio musical de todos los salteños y argentinos”.
Finalmente, Roberto Salvatierra, presidente de Pro Cultura Salta, expresó: “Cuando el maestro Saluzzi se encontraba recorriendo Japón en la década del 70’, en Salta empezamos a soñar con la posibilidad de una cultura mejor. Este año, dedicamos el 47º Abril Cultural Salteño a nuestros artistas y quisimos junto a la Secretaría de Cultura, dar forma a esta iniciativa y compartir esta distinción con el maestro Dino, quien hoy nos regala su presencia”. Emocionado, agregó “Él sabe que nosotros estamos orgullosos de reconocerlo maestro, doctor y amigo. Estamos acá porque somos capaces también de recuperar esas heridas injustas que tiene un creador cuando se tiene que ir y reivindicamos la visión de la música que desde esa época hasta hoy representan nuestra cultura en el mundo”.
Historia viva del bandoneón
Dino Saluzzi, nacido en 1935 en Campo Santo, Salta, es uno de los bandoneonistas y compositores más reconocidos internacionalmente de Argentina. Influenciado por su padre, el folclorista Cayetano Saluzzi, comenzó a tocar el bandoneón a los 7 años.
Su estilo, arraigado en el folclore del noroeste argentino, difumina las fronteras entre música popular y "culta", integrando folclore, jazz y tango. Llegó a Buenos Aires en los años 50, trabajando con figuras como Alfredo Gobbi, Enrique Francini y el Gato Barbieri.
Dino Saluzzi ha sido reconocido por su trayectoria artística con importantes premios, incluyendo el Premio Clarín a la Música en 2002, tres Premios Konex: dos de Platino (2005 y 2015) y el Premio Konex de Brillante en 2015, que lo consagró como el máximo referente de la música tradicional argentina de la última década. En 2012, recibió el Premio Fondo Nacional de las Artes a la trayectoria.
Sus obras también han sido elogiadas internacionalmente: en 2003, su álbum Responsorium fue nombrado "Álbum del Año" por la revista Down Beat, con una calificación de cinco estrellas como "obra maestra", reconocimiento que repitió en 2007 con Ojos Negros. En 2014, El Valle de la Infancia recibió el Edison Award en la categoría de Jazz Mundial en los Países Bajos.
De acuerdo a la información proporcionada por la historiadora, Luján Baudino, su éxito internacional despegó en los 80 con el sello ECM, con el que ha grabado más de 20 discos. Ha colaborado con artistas como Charlie Haden y Tomasz Stanko, y ha sido ovacionado en festivales y salas de todo el mundo. Su música ha sido utilizada en films de cineastas como Jean-Luc Godard y Pedro Almodóvar. Saluzzi ha sido reconocido con múltiples premios, como el Konex de Brillante en 2015. Su obra más reciente es Albores (2020), para bandoneón solo.
La música de Dino Saluzzi no es clasificable en otra categoría que no sea la de música argentina y su sustantivo aporte a la historia de la música de este territorio es liberar los géneros tradicionales de su función coreográfica para convertir el patrimonio musical argentino en recurso artístico.