Así lo señaló el presidente de la Unión Industrial Argentina, Martín Rapallini, quien se reunió con el gobernador Gustavo Sáenz en Casa de Gobierno.
El encuentro, calificado como "positivo" por ambas partes, no fue solo una foto institucional. Por el contrario, sirvió como escenario para una revisión completa de la agenda industrial salteña, con temas como desarrollo sustentable, competitividad, minería, infraestructura, seguridad jurídica e inversión privada sobre la mesa.
Participaron también el ministro de Producción y Desarrollo Sustentable de Salta, Martín de los Ríos; el presidente de la Unión Industrial de Salta (UIS), Eduardo Gómez Naar; y referentes de la UIA nacional como Julio Facio (vicepresidente), Luis Tendlarz (Relaciones Internacionales), Eduardo Nougués (secretario), Alejandro Gentile y Teodoro Molina.
Desde el inicio, el tono de la reunión fue técnico y orientado a resultados. Según fuentes oficiales, se realizó un repaso detallado de los principales desafíos que enfrenta la industria salteña en el actual escenario económico. La conversación giró en torno a aspectos impositivos, legislación laboral, costos logísticos, políticas de incentivo para la inversión y condiciones necesarias para mejorar la competitividad de la región.
“El objetivo es construir una agenda de desarrollo industrial sostenible que no quede en palabras, sino que se traduzca en acciones concretas para generar empleo, producción y exportaciones”, explicó Rapallini.
En ese sentido, destacó la importancia de estas visitas al interior del país como parte de una política de acercamiento federal por parte de la UIA: “Vinimos a escuchar, a entender las particularidades de Salta y a articular con el gobierno provincial una visión compartida de desarrollo”.
Salta, entre el litio y la agroindustria
Uno de los ejes que se repitió a lo largo de la jornada fue el rol de la minería —particularmente del litio— en el futuro económico de la provincia. Tanto el gobernador Sáenz como el titular de la UIA coincidieron en que la actividad minera representa una oportunidad concreta de crecimiento, pero también señalaron que su desarrollo debe ir acompañado de una estrategia industrial que permita agregar valor local.
“No se trata solo de extraer recursos, sino de industrializar, de generar trabajo calificado y de construir cadenas de valor alrededor de la minería”, afirmó Rapallini, quien insistió en que el rol del Estado es clave para crear un entorno favorable a las inversiones.
Por su parte, el presidente de la UIS, Eduardo Gómez Naar, sumó otra mirada relevante: “La agroindustria es otro de los motores que puede y debe despegar. Pero para eso necesitamos obras de infraestructura que acompañen: rutas, energía, accesos y parques industriales en condiciones”.
En ese plano, los representantes del sector privado fueron claros al señalar la necesidad urgente de mejorar las condiciones estructurales para el desarrollo productivo. Los reclamos no son nuevos, pero cobran una renovada importancia ante el interés de empresas nacionales e internacionales en establecerse en la región.
Desde la UIA se insistió en que, más allá de las condiciones naturales que ofrece Salta —como su ubicación estratégica, recursos minerales y tierras aptas para cultivos—, hace falta una inversión pública sostenida para que ese potencial se traduzca en realidad.
También fue central el tema de la seguridad jurídica y la estabilidad normativa, considerado por la entidad industrial como un factor decisivo a la hora de atraer capitales. “Si no hay reglas claras, no hay inversión posible”, resumió uno de los asistentes.
“Queremos una industria fuerte”
Durante la reunión, el gobernador Sáenz reafirmó el compromiso de su gestión con el sector productivo. Según trascendió, hizo hincapié en el rol que debe jugar el Estado provincial para garantizar condiciones adecuadas para el desarrollo económico, desde la facilitación de trámites hasta el acompañamiento financiero, la capacitación laboral y el desarrollo de infraestructura.
“Queremos una industria fuerte, diversificada, integrada a su comunidad y que genere oportunidades para los salteños”, habría afirmado el mandatario, quien también destacó que la articulación con entidades como la UIA es clave para diseñar políticas públicas eficientes y sostenibles.
Para la dirigencia empresarial, la presencia de la UIA en Salta fue interpretada como una señal clara de respaldo al potencial productivo de la región. “Es importante que nos escuchen, que conozcan nuestras problemáticas desde adentro, y que podamos construir juntos soluciones concretas”, expresó Gómez Naar, quien valoró la buena predisposición del Gobierno provincial.
En la misma línea, Rapallini subrayó que la recuperación de la industria argentina requiere una mirada integral, que incorpore a todas las regiones del país y no se concentre únicamente en el área metropolitana.
“Este tipo de reuniones permiten generar confianza, articular políticas y consolidar una relación virtuosa entre el sector público y privado”, concluyó el presidente de la UIA.
