Natalia Aguiar
Parece que sólo con el color púrpura no alcanza para poder ganar en provincia de Buenos Aires y otras jurisdicciones donde finalmente La Libertad Avanza debió acordar con el Pro. Luego de chicanas, idas y vueltas, egos, elucubraciones y muchas discrepancias, LLA y Pro irán juntos en ocho provincias para los comicios de octubre.
Además de la Capital Federal y la provincia de Buenos Aires, presentarán listas conjuntas en entre Ríos, Tucumán, Misiones, La Pampa, Río Negro y Tierra del Fuego. Estaban muy débiles, fuera de foco en esas regiones y otras más. A los libertarios no les quedó otra que hacer alianzas para ganar territorialidad.
Pese a las diferencias, la reunión entre Karina Milei y Mauricio Macri se concretó en la noche del miércoles pasado en la quinta de Olivos, a solas, en la intimidad de una compleja negociación. El encuentro sale a la luz al día siguiente cuando "El Jefe" publicó en su cuenta: “Junto al presidente del Pro, Mauricio Macri, nos pusimos de acuerdo para formar una alianza para competir juntos en la Ciudad”. Si bien ella no detalla que hubo una reunión entre ambos, marcó la cancha: “La base de este acuerdo es el compromiso innegociable de nuestros representantes en el Congreso a la hora de defender el plan económico y dar la batalla cultural cada vez que la historia lo requiera”. Macri, un poco más cauteloso, porque no entiende las razones por las que los libertarios mantienen malos modos y destratos para con él y los referentes del Pro, publica: Hubo una “buena primera reunión con Karina Milei” y advierte, como si abriera el paraguas: “El Pro tiene una misión y tenemos en claro lo que representamos”.
El mensaje encubierto de Macri a Karina sería: "Los estamos ayudando, cuidado con no cumplir con lo acordado". "No entiendo por qué nos tratan mal, son muy altaneros pero se dieron cuenta que nos necesitan porque no tienen estructura ni territorialidad". Una especie de "les falta calle, cordón y vereda".
Quizás Karina debió tragar amargo. ¿Se acaban las mieles del poder? Es que La Libertad avanza no está atravesando un buen pronóstico para las próximas elecciones provinciales, las bonaerenses del 7 de septiembre. Los números no cierran por donde se los mire. Los libertarios no tienen asegurado ganar en tierras ajenas. Estos resultados podrían replicarse a nivel nacional en octubre. Los ánimos libertarios no son buenos. Están muy preocupados. Son conscientes de estudios que revelaron que a la mayoría de los bonaerenses no les interesa votar en septiembre, o directamente decidirán no ir. Esto coloca a las elecciones y sus resultados a las estructuras de trabajo de los intendentes. Ellos marcarán el ritmo en la provincia de Buenos Aires.
Milei quiso conquistar tierras extrañas
No le fue bien. Quizás por eso hubo tantas intenciones fallidas de hacer una foto de Milei con los candidatos que encabezan las listas en las jurisdicciones bonaerenses. El presidente no conoce a los candidatos, no sólo a los de provincia de Buenos Aires, sino también a los del resto del país. De hecho, algunos, están dando que hablar de los "sustos" y "sorpresas" que evidenciaron. Desde acoso sexual, a gente delictual, denuncias, aprietes, y demás.
Por eso, a último momento Milei decidió hacer una foto en provincia de Buenos Aires, en Villa Celina. Fue su primer contacto con la tierra que no le es propia. Una apuesta provocadora en la que los suyos y los referentes del Pro cargan un cartel que reza: "Kirchnerismo Nunca Más". En alusión a lo que fue la etapa más triste de la historia argentina. Milei no había estado nunca en la Matanza, fue su primera vez. Se sacaron la foto a las 11:52 y a los 10 minutos estaban volviendo a Capital. No quería ensuciarse los zapatos con barro. Saludó a los vecinos y volvió a sus oficinas.
Dejar de insultar
Milei hizo una promesa a los argentinos: dejar de insultar. Claro que no la cumplirá. Será una misión imposible para el mandatario al que la vulgaridad y la violencia le sale por los poros. La decisión se dio a conocer durante un evento de la Fundación Faro, en medio de críticas al “colectivismo”, la “izquierda” y los “parásitos mentales”. El mandatario sorprendió a la audiencia al prometer un cambio en su estrategia comunicacional. Esta decisión presidencial surge luego de un duro informe publicado por el diario La Nación en el que se detalla la escalada verbal del mandatario con sus 611 insultos preferidos en los últimos 100 días. Ese estudio analizó discursos y entrevistas del mandatario, y reveló un aumento en la frecuencia y la crudeza de sus exabruptos, entre ellos el uso de términos sexuales. Muy grosero y fuera de lugar para un presidente que representa a todos los argentinos, los que piensan como él y aquellos que no.
Para Milie esta decisión se sustenta en poder estimular y elevar el nivel del debate público. “Voy a dejar de usar insultos a ver si están en condiciones de poder discutir ideas”, afirmó el presidente y argumentó que sus detractores se enfocan en las formas debido a su falta de capacidad intelectual para debatir ideas. Recordó la figura de Domingo Faustino Sarmiento, a quien describió como un “insultador serial” que transformó la educación argentina. ”Este conjunto de abanderados y exquisitos de las formas lo hubieran directamente condenado a la hoguera. Pero bueno, es así... La dictadura de las formas... Vamos a enfrentarlos respetándoles sus formas, así de una vez por todas, a ver si muestran tener nivel intelectual para poder darnos la batalla en las ideas. Porque lo único que hacen, como no pueden responder en las ideas, es apalancarse sobre las formas. Así que ahora les estamos lanzando un desafío, abanderados de las formas. Ahora vamos a usar las formas que a ustedes les gustan, ¿saben para qué? Para que queden en evidencia que son una cáscara vacía", es lo que dijo.
Ahora los libertarios analizan quienes serán los representantes del oficialismo en el Congreso porque quedan pocos días para el cierre de listas. Karina. "El jefe" apuesta a la obediencia de los candidatos, y Javier Milei analiza el tablero de ajedrez para poner hombres leales a él en ambas Cámaras. Sabe lo que quiere, pidió un economista ultralibertario para el Senado. Alguien que lo respalde desde allí, ya que la Economía será el eje de esta segunda etapa de su mandato. Seguramente este hombre acompañe en la lista de Capital Federal a Patricia Bullrich. Quieren a la ministra de Seguridad en el Senado para enfrentarla a Victoria Villarroel.
Si bien se volvieron a reunir Eduardo “Lule” Menem y Martín Menem con Santiago Caputo en la mesa de decisiones políticas que ocurre cada martes en la Casa Rosada, las diferencias continúan al límite de irreconciliables. En Balcarce 50 hablan de los dos bandos, el de los del Este, que responden a Caputo, porque sus oficinas dan al río , y los del Oeste, que responden a "Lule" Menem , cuya oficina mira a Plaza de Mayo. A esa mesa se suman Karina y Guillermo Francos, con su rol de conciliador.
Pese a querer mostrarse unidos y en sintonía, el miércoles pasado el Gobierno sufrió otro revés en Diputados. Se aprobó por mayoría el financiamiento universitario, el proyecto que aumenta los salarios del Hospital Garrahan y se rechazaron media docena de decretos desregulatorios de Federico Sturzenegger. La oposición le demostró al Gobierno que está en condiciones de aprobar proyectos con dos tercios. Ahora queda por ver cómo se comporta la oposición respecto a dar o no vuelta los vetos presidenciales a la Ley de Jubilaciones y la Emergencia en Discapacidad.
Si bien el Gobierno estaba convencido de que evitaría el quorum del miércoles pasado, no lo lograron. Fue entonces, que Milei salió por cadena nacional el viernes a última hora para explicar los vetos que había firmado el fin de semana pasado. Allí Milei acusó a la oposición de querer causar un "genocidio" con el aumento del gasto y propuso penalizar a los legisladores que voten más déficit fiscal, consideró que “aprobar todos estos proyectos del Congreso implica ni más ni menos que volver el tiempo atrás”. “Quiero ser muy claro con algo: no hay ninguna posibilidad de que yo permita que esto suceda. No vamos a volver atrás. no vamos a volver al pasado. No vamos a volver al sendero de la decadencia", expresó. “Y al Congreso le digo: si ustedes quieren volver atrás me van a tener que sacar con los pies para adelante”, cerró Milei.
La ex presidenta Cristina Kirchner aprovechó la ocasión, lo criticó y calificó a Milei de "loco y mentiroso” , y aseguró que “lo van a sacar con un chaleco de fuerza de la Rosada”. “Dejá de mentir con la cantinela esa de que en tu gobierno no hay emisión monetaria… Si venís emitiendo a diestra y siniestra para pagar los intereses de la timba financiera, de las operaciones con dólar futuro y las tasas de interés bancarias para que los pesos no se vayan al dólar”, escribió la ex presidenta en X.
Enfrentar la segunda etapa
La Libertad Avanza padece una gobernabilidad vulnerable. La concentración de poder en dos personas, no le ha dado buenos resultados. La falta de diálogo y consensos repercutió en el Congreso como un boomerang. Los libertarios no son territoriales, no tienen camino andado en el país, pese a ser Gobierno. Por ello, la elección de los candidatos en esta ocasión es crucial a nivel nacional. Es una fuerza que ha llegado al poder por hartazgo de los ciudadanos, por enojo con las administraciones anteriores. Sus modos virulentos, restan. A regañadientes se vieron obligados a aliarse con el Pro, acuerdo que deberá consolidarse y progresar. Javier Milei se enfrenta a la segunda etapa de su mandato y deberá surfear entre conseguir los tercios para avalar sus vetos, o realizar las reformas de fondo para que los ciudadanos puedan vivenciar cambios concretos. El desafío es enorme, el tiempo es poco. La gente necesita percibir esos cambios en la economía del día a día: la economía del supermercado.
Hasta ahora quienes hicieron el mayor esfuerzo fueron los ciudadanos. Un ajuste al límite, inhumano. Muchos reproches, codicia electoral y poca empatía. La respuesta de los argentinos estará en las urnas de octubre.