El presidente Alberto Fernández se reunirá este viernes en Roma con Kristalina Georgieva, titular del Fondo Monetario Internacional, en lo que será el primer encuentro presencial entre ambos.

La reunión será en un horario aún a determinar y tendrá como objetivo abordar temas relacionados con la renegociación de los plazos para el pago de la deuda que Argentina mantiene con ese organismo y que fueron tomados por la anterior gestión de Juntos por el Cambio.

En gobierno argentino busca postergar los vencimientos de deuda con el FMI de este año, que debe pagar entre septiembre y octubre, en el marco de la dificultad que plantea la pandemia a la Argentina y al mundo, cuando los recursos son escasos y se requieren para obtener vacunas y fortalecer el sistema sanitario y asistir a los sectores más afectados.

Argentina plantea la cancelación de la sobretasa del 2 por ciento que se le cobra a los países que recibieron un monto superior a la cuota que aporta a ese organismo multilateral de crédito, tal como lo expresó públicamente el presidente Alberto Fernández durante la declaración conjunta que realizó en Portugal junto a su par Antonio Costa, que también respaldó esta iniciativa, siendo también una nación afectada por esta sobretasa.

Otra propuesta que trabaja el gobierno nacional y que se prevé estará en la reunión entre Fernández y Georgieva es que los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI sean asignados no solo a los países más necesitados sino también a los de renta media, que abarcan el 65 por ciento de la pobreza mundial.

Fernández y Georgieva tuvieron varias conversaciones en forma virtual, y esta es la primera vez que ambos mantendrán un encuentro presencial. Georgieva estará en Roma con motivo de la realización del seminario "Soñando con un mejor reinicio" que se realizará mañana viernes en la Pontificia Academia de Ciencias Sociales del Vaticano, y en el que también participará el ministro de Ecomomía argentino, Martín Guzmán.

Según la lista de participantes, también formarán parte del encuentro, los ministros de Economía de Alemania, Francia, España e Italia. Por el momento la presencia del Papa no está prevista.